Buuuuuuuuu

Marido perdiò las llaves del auto. Se convirtiò, durante las 48 hs. que nos llevò "volver a la normalidad", en el ser màs intratable del planeta. Decir "humor de perros" hubiera sonado màs a un piropo. El viernes la cosa mejorò. Fue algo asì como el salir del arcoiris luego de un aguacero.
Estoy volviendo del laburo, me llama al celu y me dice: "cuando estès a 5 minutos de casa, avisame. Tengo una sorpresa".
Mi mente se disparò. Pensè que me compensaria por su actitud de estos dìas. Imaginè desde un super ramo de jazmines hasta pètalos de flores por la escalera.
Cuando lleguè a casa y vi cuàl era "LA" sorpresa, me dì cuenta cuànta novela de Andreita del Boca tengo encima.


Marido estaba en el baño, a oscuras, metido en la bañadera. Tenìa puesta una màscara de mostro y la càmara en la mano. Su plan: asustarme y registrar mi càmara de "asombro".



Moraleja: Cuando mi mente viaja, la de èl....vuela!


Pat