Después de la elección del domingo y de las "reflexiones" vertidas ayer por la Presidente Cristina Fernandez, vino nuevamente a mi memoria El Cuento del Rey Desnudo, porque con su simpleza y claridad, muestra cómo los hombres en la cumbre del poder, pueden caer en la irracionalidad y en la intolerancia, entre otras cosas. En esta última elección fueron muchos, cientos de miles, los que un día dijeron: La Reina Està Desnuda.
Para el que no lo conoce ò no lo recuerda este es el cuento al que me refiero:
"Este rey convoca a todos los mejores sastres de su reino para hacerle un traje especial con motivo de su coronación. De entre todos los sastres uno con mucha labia y una arrolladora personalidad convence al rey y a sus dignatarios para que se lo encargue. El traje que él diseñaría, dice, iba a ser tan especial que sería verdaderamente mágico. Pero con una advertencia importante: este traje no podrá ser visto por los necios, solamente las personas inteligentes serán capaces de apreciarlo.
En el día señalado para la prueba, el rey contempla la mirada imperturbable y sonriente de sus ministros, ninguno de los cuales quiere parecer necio aunque, por supuesto, nadie ve ningún traje. El rey se pregunta ¿seré yo un necio? –y como tampoco quiere parecerlo premia y felicita al sastre por la maravilla del traje invisible.
Llega el día de la gran fiesta y el rey aparece en público, desnudo. Nadie quiere ser necio y todos le aplauden hasta que destaca la voz de un niño que grita ¡pero si el rey va desnudo! El rey pierde la compostura e intenta taparse. A partir de aquí todos se dan cuenta del engaño"
Entiendo que sea difícil aceptar el resultado de la última elección, ya que en dos años, el FPV ve perder millones de votantes. Los números finales hablan de un apoyo a nivel nacional de un magro 26%, o lo que es lo mismo: 4 millones de votos menos que en el 2011. Curioso para un gobierno que ha logrado no hace mucho mayorías históricas. Pero cuidado. Son 10 años de gestión y el electorado en las elecciones de medio término suele votar mas libremente que cuando están en juego cargos ejecutivos, como Presidente ó Gobernador por poner ejemplos. En los últimos 2 años este Gobierno ha generado malestar en muchos sectores de la sociedad y esto se vió reflejado en el tendal de votos que perdió y que han ido a las urnas de otros candidatos. Pero atención. De mantenerse los números de cara a Octubre, en la Cámara de Diputados, el FPV no solo mantendría las bancas que ponen en juego sino que podría ganar dos escaños más, logrando quorum propio. En el Senado la situación sería un poco diferente porque podría perder 2 bancas de las 12 que renueva. Por lo tanto, no comparto los festejos desmedidos ni los pronósticos alarmistas que hablan de una pérdida de gobernabilidad. Hay que esperar. Ya vivimos el 2009.
Estimo que lo que más le preocupa al Gobierno ya no sólo de cara a Octubre sino proyectando al 2015 (y no es para menos) es que bajó considerablemente su caudal electoral, aunque si de algo se caracteriza el kirchnerismo es de no ser ni lerdo ni perezoso. Es una situación que pueden revertir pero que también puede profundizarse. Me permito también pensar que otro tema que lo "inquieta" son los representantes de la oposición que podrían sentarse en el recinto a partir de Diciembre, ya sean los viejos conocidos ó los nuevos por conocer, porque aquellos prometieron abrir el debate y dar pelea sobre ciertos temas postergados por los legisladores oficialistas según la obediencia debida dictada desde el Poder Ejecutivo. Y los aliados de ayer, empezarán inexorablemente a despegarse. Hay un dicho popular que dice "peronista es aquel que está siempre dispuesto a salir en ayuda del vencedor".
Esto es tan cierto como que el FPV sigue siendo la primera fuerza a nivel nacional, tan cierto como que son Gobierno dos años más y tan cierto como que ganaron en la Antártida.
Pero frente a este escenario y dado que es la Presidente de los 40 millones de argentinos, como a ELLA le gusta decir, ¿debe reaccionar como lo hizo ayer?. No al menos si lo que se busca es reconquistar al votante que se fue ó conquistar al que está indeciso. Debería saber que ayer al descalificar a los candidatos elegidos democráticamente, descalificó a quienes los votaron que forman parte de esos 40 millones que representa.
No es aceptable el argumento de que cuando el oficialismo triunfa en la urnas se debe a que la gente eligió la Patria y en cambio cuando el oficialismo pierde, se debe a que los intereses de las corporaciones triunfaron.
Hay que saber perder, pero resulta imposible cuando no reconocen que se perdió.
Volviendo al Cuento del Rey Desnudo, creo que el FPV no tiene que enojarse con la realidad, tiene que entenderla, comprenderla. Perder una elección también forma parte del juego democrático. Porque nada bueno se puede construir ó reconstruir si uno niega la realidad en la que vive, si unos pocos se proclaman inteligentes y dueños de la verdad y tildan al resto de necios que nada ven ó saben.
Faltan dos meses para la segunda vuelta.
Falta mucho.
Falta todo.
Patricia De Vita
Comentario: El autor del cuento es Hans Christian Andersen