miércoles, 19 de enero de 2011

Palabras Prohibidas

No hace mucho tenìamos un grupete de amigos y amigos de amigos que nos juntàbamos a comer en un bar de Palermo. La particularidad del lugar era que aparte de comer rico, tenia dos estanterìas llenas de juegos de mesa, asi que nuestras sobremesas jugando al Sexionary ya eran un clàsico.
Una noche, mi amiga R nos advierte que iba a venir Fulanito con su novia. El tema era que la novia tenia una difultad (que despues nos darìamos cuenta que eran dos): era gangosa y tenia labio leporino.
Un garròn no sòlo para ella, sino para el "grupo de las chicas" que la ìbamos a tener de compañera en el juego y ya se vislumbraba que no iba a ser fàcil ganarle a los muchachos. Seamos sinceras: lo que nos importa no es competir sino ganar.
La advertencia de R vino genial porque cuando llegò Fulanito & Cia. realmente era muy dificil entenderle una oraciòn completa con todo el bullicio del lugar. Le teniamos que poner mucha onda...pero mucha eh!.
Terminamos de comer. Decidimos jugar al Sexionary pero para cambiar un poco, en vez de jugar dibujando, decidimos jugarlo con mìmica. Cada uno iba sacando su tarjeta y hacia lo suyo para que su equipo ganara el punto. El tema fue que cuando le toca el turno a la novia de Fulanito, saliò el famoso "todos juegan", o sea: ella hacìa la mìmima y chicos y chicas juegan. El que primero acierte, se lleva el punto.
Sacò la tarjeta y acà empezò el momento màs tenso de la velada. Comienzò a señalarse continuamente sus labios!!!. Por respeto, nadie queria decir nada desubicado.
Los primeros gritos fueron: labios, labio, boca, sexo oral, chupar, pero segùn la cara de la chica, todas estaban cerca pero ninguna era la correcta. Habremos estado casi un minuto asì. Ella seguìa con los mismos gestos que mas que ayudar nos desorientaban. Ya todos nos dàbamos por vencidos. Era preferible perder ese punto y salir de esa situaciòn incòmoda.
Hasta que una voz masculina, desesperada por ganar, lanzò la ùltima y ùnica alternativa que a nadie se le hubiera ocurrido (aunque todos lo pensamos): LABIO LEPORINO!!!!!.
Ella negò con la cabeza.
Todos reimos nerviosamente.
La palabra era: Labio Superior.

No podia creer que lo haya dicho!!!





Pero.....marido es asì.




Pat

6 comentarios:

  1. juaaaaaaaaaaaaa. Yo me veo venir algo asi y por las dudas dejo el auto en marcha en la puerta.
    Es como salir a jugar digalo como locutor con nuestra pte que tantas aegrias nos da gracias a que habla como el orrrrto aparte de que le quedan 3 de 11 jugadores

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  2. yo tengo una hija de dos meses con este padecimiento congenito. Y es triste pensar que quien esperabas que fuera perfecto nace con este defecto. El mundo es cruel, pues somos elitistas y como somos "perfectos" no nos damos cuenta de lo bendecidos que somos. Afortunadamente la ciencia ha logrado grandes avances en este tema y este padecimiento puede ser corregido hasta en un 95% o más. Javier Bardem es un ejemplo de ello. El intelecto además no se ve afectado en nada, bueno si, una vez que los que no podemos aceptar que esto sucede, nos mofamos.

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  3. para mi que marido pensó que labio leporino era una posición sexual.

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  4. Despues de esto, ya no se què piensa marido!!

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  5. yo tengo un perro de dos años y tiene ese problema, si, es un caso unico o muy poco visto, y aparte no puedo tener hijos, y a ´sl lo tomo como tal, por lo que vi, no hay falta de respeto pero justo con la otra persona anonima compartimos lo mismo, sin conocernos, igual esta buena la anecdota, y es hasta graciosa, saludos.
    C.S.M

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  6. Anonimo C.S.M. gracias por el comentario. Realmente quise ser sincera y contar la anecdota tal como fue. Me pareció que si la modificaba para hacerla "politicamente correcta" caia en el acto de discriminación que queria evitar. Gracias por leer el blog. saludos.

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